Llevamos varios días como dos niños chicos esperando que llegase el viernes dia 14-12-09 para hacer una ruta que teníamos preparada mi buen amigo Rafa y yo.
El día amaneció genial invitando a tirar para arriba. A las 8.30 quedamos, y a las 9.45 empezamos la subida. Decidimos, debido al día que hacía, subir a peñalara y bajar por las lagunas.
Desde el puerto de Cotos (1830m.) empezamos con mucho aire, pero mi forma física no es lo que era, y subimos al tran tran (yo detrás). Rafa no es que sea Juanito Oyarzabal pero está en mejor forma.
Da gusto subir y ver que las antiguas pistas se van repoblando y a bastante rapidez. El camino no tiene pérdida, se va ganando altura con relativa facilidad, aunque hay rozos que cuestan sobre todo por la nieve y el hielo. Llegamos a Hermana Menor (2.269 m), y 2.9 km. desde el inicio las vistas son espectaculares, aunque no es la mejor época por el colorido de otros meses. Refugio Zabala, Guarramillas, Cabeza de Hierro, cerro de Valdemartín, y, por supuesto, Hermana Mayor y Peñalara. Después de una breve parada seguimos hacia Hermana Mayor(2.850 m.).
Era un día tan claro que las vistas de la granja y la meseta segoviana eran geniales. Seguimos hasta la cumbre de Peñalara (2.430m), punto mas alto de la Comunidad de Madrid. Hemos recorrido 5km. en unas dos horas y 600 metros de desnivel.
La parada arriba es obligada, a refrescarse, comer algo y disfrutar de la cima. Hay una bella panorámica. Después de ver que la cima era todo hielo, no podíamos seguir sin crampones ni raquetas (imposible). El Risco de los Claveles tendrá que esperar a mejor ocasión.
Decidimos bajar e ir por el otro lado, donde la bajada es muy rápida aunque peligrosa por el hielo y las piedras.
Hemos tenido la suerte de ver el vuelo majestuoso de los buitres Negros y Leonados.
Cuando empezamos la subida, yo dije que no podía más, y nos paramos a comer en un lugar con una paz increible en la que sólo se oía el agua correr, y contemplamos las impresionantes paredes negras y verticales de la Laguna Grande, que no está tan concurrida como siempre (sólo había dos personas y un guarda, que charlamos con él un rato).
Al final hicimos una parada en el mirador de la Gitana (1.902m), donde hay una guía de cimas para identificar la mayoría de las cumbres de cuerda larga y un curioso reloj de sol, pasando por fuente Cubeiro. Después de un día maravilloso, volvimos a casa.
